Comprar o alquilar una vivienda es una de las decisiones más importantes (y caras) que podemos tomar. Y como todo lo que mueve bastante dinero, el sector inmobiliario no está libre de timos y listillos que intentan aprovecharse de la gente. Aunque la mayoría de las operaciones son legales y normales, siempre hay algún espabilao intentando sacar tajada.
¿Quieres saber cómo evitar caer en una estafa inmobiliaria? En este artículo te contamos los engaños más comunes, las señales de alarma y los pasos que deberías seguir para protegerte. Porque prevenir, en este caso, no solo es mejor que curar… ¡es imprescindible!
1. Desconfía de los chollos
Si ves un anuncio de un piso espectacular, bien ubicado y a un precio ridículamente bajo… probablemente haya gato encerrado.
Uno de los trucos más usados por los estafadores es poner precios muy por debajo del mercado para llamar la atención. A veces dicen que lo necesitan vender o alquilar rápido por una mudanza, un divorcio o algo por el estilo. Pero en realidad, lo que quieren es que sueltes una señal sin haber visto nada.
👉 Consejo: compara siempre con otros pisos similares de la zona. Si uno está un 30% más barato que el resto, huele a timo.
2. Nunca pagues nada sin ver el piso
Parece de sentido común, pero hay mucha gente que sigue cayendo. Un truco clásico es pedirte una señal o reserva sin enseñarte la vivienda, con excusas como:
- “Estoy en el extranjero, pero te envío las llaves por mensajería”
- “Tengo varios interesados, si no lo coges ya lo pierdes”
- “Por seguridad, todo se hace online y luego te damos acceso”
Todo mentira. Muchas veces ni siquiera existe el piso o no tienen ningún derecho sobre él.
👉 Consejo: no des ni un céntimo sin haber visto el inmueble en persona y comprobar que es real.
3. Verifica la identidad del propietario
Otro truco muy típico es hacerse pasar por el dueño de un piso que no es suyo. Incluso pueden tener llaves (si lo han alquilado antes) o fotos reales.
Por eso es fundamental comprobar que la persona con la que estás tratando es quien dice ser.
👉 ¿Cómo hacerlo?
- Pide su DNI y una copia de la escritura de propiedad o una nota simple del Registro.
- Si estás tratando con una agencia, comprueba que está registrada legalmente y tiene buenas opiniones.
4. Siempre, siempre, firmad un contrato
Ya sea compra o alquiler, todo debe quedar por escrito. El contrato tiene que incluir los datos completos de ambas partes, la descripción del inmueble, las condiciones acordadas y las firmas.
Desconfía si:
- Te dicen que no hace falta contrato, que lo vais viendo “sobre la marcha”.
- El documento tiene errores, nombres que no coinciden o está incompleto.
- Aparecen personas que no sabías que estaban implicadas.
👉 Consejo: si algo no te cuadra, consulta a un abogado. Mejor pagar una revisión que comerse un marrón después.
5. Revisa los papeles del piso
Antes de comprar, asegúrate de que todo esté al día:
- Que no tenga hipotecas pendientes ni embargos.
- Que no haya deudas con la comunidad o el IBI.
- Que no esté ocupado por inquilinos si tú lo vas a usar.
Todo esto se comprueba con una nota simple, los últimos recibos del IBI y un certificado de deuda cero de la comunidad.

👉 Consejo: también conviene comprobar que los metros y distribución coinciden con lo que dice la escritura o catastro.
6. Usa portales y canales fiables
Los portales inmobiliarios conocidos (Idealista, Fotocasa, etc.) suelen tener más filtros de seguridad que redes sociales, donde cualquiera puede colgar un anuncio.
Eso sí, que esté en una web “seria” no significa que no haya timos.
👉 Consejo: si ves un anuncio sospechoso, denúncialo en la propia plataforma. Así ayudas a evitar que engañen a otra persona.
7. Ojo con los alquileres fantasmas
Hay estafadores que cuelgan pisos inventados o ya alquilados, y piden dinero por adelantado para “reservarlos”. Esto pasa mucho en ciudades universitarias o zonas turísticas, donde hay mucha demanda.
👉 Consejo: si estás buscando desde otra ciudad, pide a alguien de confianza que lo visite. Y si no es posible verlo “por motivos logísticos”, mejor pasa del tema.
8. Cuidado con la presión
Los timadores suelen meterte prisa. Te dicen que hay otro interesado, que tienes que decidir ya, que si no das la señal en una hora lo pierdes… Todo para que no tengas tiempo de pensar ni comprobar nada.
👉 Consejo: si te apuran demasiado, mala señal. Lo bueno de verdad no necesita tanta urgencia ni tantas vueltas raras.
9. Guarda todas las pruebas
Si por desgracia te estafan (esperamos que no), todo lo que tengas puede servir para denunciar: emails, mensajes, recibos, capturas de pantalla…
👉 Consejo: haz siempre los pagos por métodos rastreables (transferencia, bizum). Evita el efectivo si no hay un recibo firmado.
10. Ante la duda, asesórate
No hace falta ser abogado ni experto en inmuebles, pero si algo no te cuadra, mejor preguntar. A veces una consulta de 100 € te puede evitar perder miles por confiarte.
Conclusión
Las estafas inmobiliarias están ahí, pero con un poco de cabeza y sentido común se pueden evitar. Si algo parece demasiado bueno, si no te dejan ver el piso, si te presionan para pagar… sal corriendo.
Antes de firmar o pagar, asegúrate de que:
✅ Has visto la vivienda
✅ Sabes quién es el propietario real
✅ Tenéis contrato y documentación en regla
Si todo eso está claro, adelante. Y si no… mejor esperar. Porque en esto, más vale perder una oportunidad que meterse en un lío.